Hasta hace un par de días, Laura Sarabia era considerada la mano derecha del presidente Petro. Desde su posición como Jefe de Gabinete (aunque en realidad el cargo se llama Jefe del Despacho Presidencial), alcanzó bastante poder que algunos calificaron de excesivo. La semana que terminó, estalló un escándalo por cuenta de las declaraciones de su ex niñera, Marelbys Meza, quien afirmó que había sido coaccionada para someterla, irregularmente, a una prueba de polígrafo, como presunta responsable del robo de una maleta con dinero que sustrajeron de la casa de la alta funcionaria. Estas declaraciones, sumadas al descubrimiento de la fiscalía de que la línea telefónica de Marelbys había sido intervenida, también ilegalmente, terminaron por tumbar a la doctora Sarabia, y de paso, originaron la salida del embajador en Venezuela, Armando Benedetti, quien está involucrado en todo este tejemaneje.
Aunque no soy abogado (me faltaron sólo 10 semestres y la judicatura para graduarme), entiendo que en todo este entramado se configuran varios delitos y faltas disciplinarias, que me imagino la Procuraduría estará investigando: abuso de poder; la utilización de recursos públicos (infraestructura, equipos, personal, vehículos, etc.) y los organismos de investigación del estado para resolver asuntos domésticos; a Marelbys la metieron en el sótano de un edificio aledaño a la Casa de Nariño, sin registrarla oficialmente, y la intimidaron durante el interrogatorio y, además, su nombre lo incluyeron arbitrariamente en una lista de los teléfonos por interceptar al “Clan del Golfo”, para poderlos “chuzar”. Si así el Gobierno pone a andar el aparato de inteligencia del estado y usa la Dirección de Investigación Judicial (DIJIN) al servicio de interés particulares, que podemos esperar que haga cuando alguien, digamos un periodista, influenciador o líder de la oposición, les resulte tremendamente incómodo.
En su alocución televisada, el presidente Petro dijo que el Gobierno no tuvo nada que ver con las “chuzadas”. Aclaró tanto lo sucedido que finalmente, terminó oscureciéndolo. El haber retirado a Laura Sanabria y Armando Benedetti, no quita el manto de duda que aún recae sobre las actuaciones del Gobierno. Hay varias preguntas que ameritan una respuesta:
-Al fin, ¿cuánta plata tenía Laura Sarabia en la maleta de su casa y cuál era su origen? Ella habló de 7.000 dólares, pero otras versiones, hablan de 150 millones de pesos. Cualquiera que sea la cantidad, es una suma alta para tenerla en efectivo en casa. ¿Será que Petro y su círculo cercano no están bancarizados? A él mismo, lo grabaron echando fajos de billetes en una bolsa; su hijo Nicolás, según declaraciones su ex esposa Day Vásquez, guardaba fuertes sumas de dinero en el apartamento y a Piedad Córdoba la encontraron transportando, en Honduras, 60.000 dólares.
-¿Quién ordenó la chuzadas ilegal al teléfono de Marelbys? El presidente ya dijo que él no fue, al igual que dijo que no crio a Nicolás ni tampoco escribió el trino equivocado en el cual afirmó que habían encontrado a los niños indígenas extraviados en las selvas del Guaviare.
-¿Por qué Benedetti sacó a Marelbys del país con destino a Venezuela? ¿Por qué utilizó un vuelo privado y no una aerolínea comercial? ¿Quién pagó ese vuelo chárter?
-¿Todo esto fue orquestado por Benedetti para que saliera Laura Sarabia? ¿Por qué ahora le tiene un odio enconado si anteriormente había trinado que la quería como a una hija?
-¿Quién ordenó que sometieran a Marelbys al polígrafo? Me atrevería a decir que fue la misma Laura Sarabia, a juzgar por las dos preguntas finales del interrogatorio: ¿usted ha dejado caer al niño? y ¿usted se comió el último Alpinito que quedaba en la nevera?
Dada la gravedad de los acontecimientos que se conocen hasta ahora, me asaltan dos preguntas más: ¿qué clase de personas son las que hacen parte del Gobierno? ¿seguirán estos funcionarios moviendo “un poquito” la línea ética?
Caracol Televisión ya anunció que próximamente estrenará, en horario prime, una telenovela basada en estos hechos. Se llamará La Niñera. En el protagónico estarán Alina Lozano como Marelbys Meza, Carla Giraldo como Laura Sarabia, Julián Román será Armando Benedetti y en el rol del presidente Petro, estará Germán Escallón, que tal vez lo recordarán por haber protagonizado la comedia N.N. en los años 90. El canal también comentó que le vendió los derechos de la telenovela a Netflix quien producirá una miniserie de seis capítulos que se llamará Nannygate. Aunque no se ha confirmado el reparto, se rumora que Andy Serkis (quien hizo el papel de Gollum en el Señor de Los Anillos), será el presidente Petro.
Remate al Arco: Con esta bomba que explotó desde adentro, Colombia no había estado tan expectante desde la presentación del informe de Betty en Ecomoda.
Hola Jorge. Sin duda este acontecimiento ha vuelto a dejar en duda al Presidente Petro y el manejo que se dio a su campaña. Así mismo la pobre actuación de él en muchos programas de este Gobierno, es más ayer o antier oí en noticias que él (estando al lado de Francia) decía que le iban a dar un golpe de estado y que le tocaría cerrar algunos medios de Prensa, lo que ratificaría su posición Socialista. Sin duda hay que seguir orando por nuestro País para que no nos convirtamos en otra Venezuela. Saludos
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